Buitrago del Lozoya, Madrid (Lote 1)
El lugar
Buitrago del Lozoya está situado a 80 kilómetros al norte de la ciudad de Madrid. Se encuentra en la zona media del valle del Lozoya, en la comarca de la Sierra Norte, que linda con las provincias de Segovia y Guadalajara. Buitrago es el municipio más poblado de todo el valle y cuenta con un censo de más de 1950 habitantes.
El núcleo urbano de Buitrago se asienta en un terreno delimitado por un pronunciado meandro que forma el río Lozoya, entre los embalses de Riosequillo y Puentes Viejas. Ocupa una posición estratégica, al pasar por él la ruta que conecta con el puerto de Somosierra, único paso que permite cruzar con facilidad esta parte del Sistema Central.
La villa fue declarada en 1993 Conjunto Histórico-Artístico y Bien de Interés Cultural, gracias a su recinto amurallado, el mejor conservado de la Comunidad de Madrid.
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Propuesta de intervención
Recuperación del Rancho del Esquileo (Lote 1)
El ámbito de actuación está situado en el extremo sur del recinto amurallado de la Villa de Buitrago. Está delimitado al sur por la muralla, al norte por la calle del Infantado, al oeste por la iglesia de Santa María del Castillo y al este por el Alcázar.
Esta zona, aunque actualmente se encuentra degradada y en estado de ruina, tiene un gran valor histórico y un alto potencial para convertirse en un centro de atracción turística y cultural.
Por ello, desde hace tiempo, el ámbito propuesto viene siendo centro de atención del Ayuntamiento de Buitrago y de la Comunidad de Madrid como lugar adecuado para albergar usos y actividades de carácter público y cultural.
La propuesta debe estar dirigida fundamentalmente a la reconstrucción de las ruinas del esquileo y su rehabilitación como alojamiento turístico público. Este complejo deberá contar con las dependencias básicas propias de este uso, tales como habitaciones, apartamentos, comedores, salones, espacios de almacenaje, etc.
La distribución de los espacios y el tipo y la capacidad de alojamiento de cada uno de los edificios no están predefinidos, sino que deberán ser determinados por los propios concursantes según lo que consideren más apropiado tanto para potenciar los valores propios del conjunto y su relación con su entorno inmediato como para su mejor funcionamiento.
Además, debe plantearse la recuperación y recomposición del espacio público colindante marcado en verde en el plano de la zona de actuación. Es decir, la propuesta debe incluir el tratamiento de la Plaza del Gato, su conexión con el espacio público de la plaza de Angelines Paíno y el espacio verde que circunda el ábside de la iglesia y que probablemente forma parte de su primitivo recinto
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